tan amado por mi , puesto en mis manos por la vida que me animaba a sanarme, llego a mi vista de una manera especial a pesar de hbaer visto muchos no habia visto nada, y me llego para vestirme de muerta sacra. Por que ayuda a morir como el rebozo ....asi les pasa amuchas mujeres mexicanas. La manera de como se usa es ritual de dias y lunas , pero muchos lo ven solo como la reliquia de dias pasados que se deben de tener. " unpar de ellos para los dias de fiestas septembrinas" " para lucirlos con la comadre" " para viajar al extranjero y ahi dar clases de mexicaneidad" " para cursos de meditacion y new age"
por que es una prenda que no se debe de mal vender mal comprar ni mal lavar ni mal tener; si no sabes para que tienes uno? la manera de hacerse de uno es de comprender primero la tradicion Mexicana su historia y su conciencia.....despues de la conquista las indigenas criollas y mestizas tuvieron que hacer uso de varias tendencias......por que asi lo mandaba la sociedad como la mezcla de texturas de algodoes de hilos y de botonadura modo sde colocarselos y de doblarlos , empezo la vision de ellas mismas encuanto a sus cambios socioeconomicos y culturales , los hijos crecieron con una cultura de aprendizajes y ellos los misioneros entendian esto masno hiceron mano de ello, hasta que los estudiosos de la mexicanidad como las familias de los Tlatoanis en 1940 , descendientes de estas castas
inciaron una guerra contra la incomprension del textil mexicano el huipil a la fecha se usa en todas las entidades de mi pais y lo que pido solo es que sea de manera respetuosa a su historia y a su uso
los textiles en mexico sufrieron mucho con la devaluacion paulatina del peso , haciendo caras estas prendas para la emnet debil de los que no los usan : una prenda de mediano ver la compras por la mitad del precio de un huipil ..si pero se va en dos lavadas, ademas no son hechs a mano , si no en maquila a granel y huele a consumismo de lo peor. Abre tu conciencia a su uso, cos ey borda uno y veras lo que es el placer de portarlo sanas de verdad.
